¿Sabes qué es una cata vertical y una cata horizontal?

 

En no pocas ocasiones, cuando se habla de catar un vino parece que nos refiramos, casi exclusivamente, a servir un poco en una copa y a tomar nota de sus propiedades. Sin embargo, hay diferentes tipos de catas, dos de las más conocidas son las catas horizontales y las catas verticales, que se llevan a cabo para certificar la calidad de cada vino. Te explicamos cuáles son y la importancia de cada una de ellas a continuación.

¿Qué es una cata horizontal?

Consiste en catar varios vinos, de bodegas distintas, de la misma añada, y de la misma denominación de origen. Además, se escogen aquellos que están elaborados con la misma variedad de uva. El objetivo es analizar cómo ha evolucionado cada uno de ellos y de qué forma influye el microclima de cada bodega en su sabor.

cata horizontal y cata vertical de vinos

Este tipo de catas las pueden organizar los consejos reguladores con el único objetivo de analizar si cada vino cumple con los requisitos estipulados. Igualmente, resulta sencillo analizar cómo se elabora cada vino e incluso la presencia de algún tipo de componente extraño que influya, de forma directa, sobre el resultado final.

No obstante, las propias bodegas suelen organizar este tipo de catas para compararse con los vinos que elaboran las bodegas de su entorno. Las catas horizontales se llevan a cabo de manera periódica solicitando a cada bodega una cantidad de vino procedente de la cuba, o bota, correspondiente a una añada concreta. Es también una herramienta básica para los que compran vino al por mayor para embotellarlo.

¿Qué es una cata vertical?

Su objetivo es catar las distintas añadas del mismo vino. Al conocer el año de producción de cada botella, resulta fácil deducir cómo ha ido afectando el clima a cada barrica, cuba o bota. Si en una de estas catas se prueban, por ejemplo, los años 2005, 2006 y 2007 del mismo vino, es para llegar a una conclusión certera sobre la influencia de distintos agentes externos sobre la calidad de cada añada.

Esta modalidad la puede solicitar el Consejo Regulador, aunque es más habitual que la organice la propia bodega, para conocer qué debe corregir si quiere lograr los mejores resultados posibles. Igualmente, hay investigadores del vino que también podrían solicitar llevar a cabo este tipo de cata para hacer un estudio más específico en el que se conecten los factores arriba mencionados con los resultados obtenidos.

Hay que destacar que estas catas no se centran tanto en descubrir el sabor del vino sino en otros detalles técnicos. De hecho, los informes generados tras una de ellas son exhaustivos y analizan, con acierto y detenimiento, todos los factores que han intervenido en el sabor conseguido en cada añada. Se le presta atención especial a cómo evoluciona el vino en la botella y, sobre todo, a los cambios en la forma de producir el vino que haya que aplicar para lograr los mejores resultados.

¿Por qué son imprescindibles estas catas?

El vino no es un producto artificial hecho a base de químicos. No hay una fórmula magistral para conseguir siempre el mismo sabor. Es una bebida natural que está viva y que evoluciona constantemente. El análisis de una añada de varias bodegas es conveniente para conocer la calidad del vino de un año determinado y también, he aquí su secreto, si se mantiene la forma tradicional de elaborar los caldos de un zona determinada.

Sin embargo, la cata vertical está más enfocada a los propios intereses de cada bodega. Igualmente, el análisis detallado de todas las características del vino en distintas añadas es una gran inversión que ayudará a mejorar la producción y la calidad.

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La cata tradicional

También se denomina cata hedónica ya que su único objetivo es descubrir los secretos del vino a probar. Es necesario reseñar que esta suele ser la única a la que tiene acceso el gran público. En este caso se analizan las sensaciones que genera un vino a través de tres fases: visual, olfativa y gustativa. A través de las mismas, el consumidor se puede hacer una idea de las características organolépticas del producto así como la calidad del mismo.

¿Es útil esta cata para los bodegueros? Sin duda alguna. Los tecnicismos quedan a un lado para dar a conocer el producto a los potenciales consumidores finales. Es el final de proceso y el reconocimiento de la encomiable labor del enólogo y del resto de personal de la bodega.

¿Qué se busca en cada una de estas catas?

cata horizontal y cata vertical de vinos

En la horizontal que se cumplan los requisitos del Consejo Regulador. En la vertical, el equilibrio. Como hemos comentado, el sueño de cada bodeguero es crear un vino con personalidad, con un sabor concreto que pueda ser reconocido fácilmente. Sin embargo, conociendo de antemano la dificultad de lograr este objetivo, se apuesta, claramente, por elaborar vinos equilibrados.

Muchos son los matices gustativos que entran en juego a la hora de elaborar un vino. La acidez, el dulzor o la astringencia son solo tres de ellos, pero es necesario encontrar un equilibrio perfecto y que cada persona encuentre todos los matices al mismo tiempo, sin que sobresalga ninguno de ellos.

Por este motivo, se invita a sumilleres y a estudiosos del vino a las catas verticales: para intentar conocer mucho mejor cómo lograr el mejor resultado en cada botella. Las catas son una herramienta de incalculable valor para conseguir elaborar vinos de alta calidad.

Un placer en cada copa

Quizá ahora no solo conozcas algo más sobre estas catas, sino también sobre el enorme esfuerzo que hacen los bodegueros para ofrecerte un producto perfecto que consiga generarte sensaciones diversas. El trabajo es ímprobo, pero la satisfacción es muy alta al comprobar cómo el vino en cuestión recibe la mejor valoración por parte de cualquier persona.

La cata horizontal y la cata vertical son dos exámenes más que complicados que pasa el vino antes de llegar a tu copa. Solo así es posible disfrutar tanto como lo hacemos de un vino de calidad mientras comemos con nuestros amigos o familiares. A buen seguro, la próxima vez que abras una botella apreciarás mucho más todo el trabajo que hay detrás de este producto natural que vas a degustar y a paladear en un instante.

 

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